Serendypity AC-DC

Ya jugué todos los juegos y me tiré al piso y rodé. Ya hice galletitas, carreras de embolsados, ya junté por décimo enésima vez toooodos los juguetes, de tooodos los juegos. Ya leí un par de libros, ya limpié, ordené, ya hice cursos online, webinar. Ya podé las plantas, saqué la tierrita de todos los rincones que por cierto, día a día se vuelve a juntar, y la vuelvo a sacar. Ya "Saqué" esa canción, la dificil, que tanto me costaba. Ya tengo rutina de ejercicios y de todo lo que se puedan imaginar.

Ya tengo organizado, planificado y sub planificado lo que haré de acá hasta que se descubra que existe un lugar donde "la mayoría de las cosas carezcan de nombre", como dice G.G. Marquez, en sus 100 años de soledad. Y es que como sabrán, yo vengo de la escuela de los negocios, donde para tener éxito, lo primordial es la planificación, la estructura, la investigación.

Y de pronto... la calma, el silencio! Estados en los que no acostumbro a estar: La quietud, que si o si me obliga a enfrentarme con aquellas cosas que estaban dentro y que nunca, en el ritmo desaforado del día a día me permití si quiera repasar. O quizás si, pero, de refilón, porque no tenía mucho tiempo, y ya veremos después! Entonces, me pidieron que me quedara en mi casa, y cuando ya había hecho todas las cosas que había por hacer allí, algo me pidió que me centrara en mi interior, que fuera hacia dentro, tal como el invierno nos obliga a "guardarnos", pero no para esconderme allí, sino para prepararme para una próxima primavera en la que todo sin lugar a dudas florecerá.

Esta sigla, "AC-DC" que marcó al mundo, y con el que nos referimos culturalmente a un antes y un después en la historia de la humanidad se repite hoy, y ahora me marcó a mí. Creo que es demasiado importante poder tomarlo como un evento "Serendipity" (Serendipia), es decir, Descubrimientos afortunados que se producen sin planificación, que nos despiertan la curiosidad y nos abren el foco.
Uno está buscando una cosa, y se encuentra con otra. O quizás no está buscando nada, pero se mantiene expectante a este mundo sofisticado que no deja de darnos señales. Que nos deja de darnos oportunidades. Hay que estar preparado para lo inesperado, porque quizás del fango más podrido nazca una flor inmaculada... porque como dice un maestro budista, "El invierno Siempre, se convierte en primavera!" 

Hoy este espacio para la reflexión, que tenemos la oportunidad como humanidad de estar viviendo se llama "Antes del Covid- Después del Covid" AC-DC. Donde nosotros, los de antes, tenemos la posibilidad de no ser los mismos.